Vinculados a la localidad de Gavín hay tres monumentos que vamos a conocer un poco mas: la iglesia de Santa María de Gavín, la de San Bartolomé y el monasterio de San Pelay.

SANTA MARÍA DE GAVÍN

La localidad de Gavín se encuentra a 3 kilómetros de Biescas orientada al sur a una altitud de 974 m. En la fotografía vemos cómo era la iglesia de Santa María  antes de la guerra civil española. Foto: Archivo del Gobierno de Aragón.

Iglesia de Santa María en Gavín en la década de los años 50, con las huellas de los bombardeos.

Durante la guerra civil todo el pueblo, incluida la iglesia, fueron prácticamente arrasados por las bombas. En la revista Serrablo 138 hay un artículo de Gilda Ayerdi que recoge la naración por un combatiente republicanolos de los acontecimientos bélicos en varios pueblos, entre ellos Gavín.

 

Sólo se salvó parte del ábside semicircular que ha estado abandonado a su suerte durante cuarenta años.

En 1976 Amigos de Serrablo trasladó piedra a piedra los restos del ábside y los restituyó en el parque municipal de Sabiñánigo.

En la fotografía se ve la numeración de los sillares del ábside para su restitución exacta.

El parque municipal de Sabiñánigo está construído sobre una escombrera. Su ideólogo fue Julio Gavín.

El ábside de Santa María de Gavín responde al modelo de las iglesias serrablesas: ábside semicirular cubierto por bóveda de horno. Fotografía: Jose Antonio Duce

El exterior del ábside estaba decorado con siete arcos ciegos (solo se conservan cinco) y friso de baquetones debajo del alero. Fotografía: Jose Antonio Duce

El interior del ábside se ilumina con una ventana aspillera en su centro. Fotografía: Jose Antonio Duce

Detalle del friso de baquetones bajo el alero y los arcos ciegos que apoyan sobre lesenas o pilaretes adosados al ábside. Fotografía: Jose Antonio Duce

Detalle de la moldura tórica de la parte inferior del ábside- Fotografía: Jose Antonio Duce

Algo positivo de las ruinas es que se puede aprender cómo están construidas las iglesias de de Serrablo. Fotografía: Jose Antonio Duce

Estado actual del Parque Municipal de Sabiñánigo con el resplandeciente ábside de Santa María de Gavín, protagonista del espacio público.

En el parque municipal de Sabiñánigo, junto al ábside de Santa María de Gavín, otros elementos patrimoniales recuperados del expolio como la ventana de la iglesia de San Martín de Castiello de Guarga.

 ERMITA DE SAN BARTOLOMÉ DE GAVÍN

 En la revista Serrablo, 9 de 1975 leemos: «La torre de San Bartolomé de Gavín es, sin duda, uno de los mas bellos exponentes del arte mozárabe serrablés. La torre no ha sufrido alteraciones, se conserva toda su fisonomía original. 

La ermita de San Bartolomé estaba vinculada a la iglesia de Santa María de Gavín. Se encuentra a la izquierda de la carretera que va de Gavín al puerto de Cotefablo.

Fotografía de San Bartolomé en 1969, se aprecian los tejados espaldados y la fachada de la nave encalada de blanco. En 1973 y 1976  Amigos de Serrablo restauró la torre y los vecinos de Gavín el resto del monumento.

Las construcciones mas antiguas son la torre y parte del muro sur. El edificio tiene una sola nave y presenta un ábside rectangular al exterior. Fotografía: José Antonio Duce.

La torre es de planta cuadrada, cubierta con bóveda esquifada y tejado a cuatro aguas. De factura independiente pero unida a la nave por dos puertas de arco de herradura. Fotografía: José Antonio Duce.

Preciosa estampa de la torre de San Bartolomé. La torre se decora con un friso de baquetones flanqueados por cordones, debajo del alero, en todas sus caras. Fotografía: José Antonio Duce.

En primer plano ventana geminada con arcos de herradura. El parteluz está formado por «rodajas» de piedra. Fotografía: José Antonio Duce.

Debajo de las ventanas tríforas hay dos círculos despiezados en diez dovelas que dejan un pequeño círculo en el centro. Estas parejas de círculos están enmarcadas por cordones y se repiten en las cuatro caras de la torre. Fotografía: José Antonio Duce.

En la torre, ventana de un solo vano con arco de herradura. Fotografía: José Antonio Duce.

Plano frontal del muro sur de la torre donde se abre una aspillera con arco de herradura que apoya sobre una laja. Esta ventana es muy parecida a la de la iglesia de Yésero.

«Obra capital del mozárabe serrablés, esta torre presenta una ornamentación que no tiene igual en los demás monumentos del grupo». Durán Gudiol y Buesa Conde en Guia monumental y artística de Serrabo.

Fotografía de 1969 en la que se ve el estado de las rosetas de una de las caras de la torre.

En los pies de la iglesia se abre una ventana geminada con arcos de herradura y de la misma factura que las tríforas.

La torre está construida en el lado sur de la ermita por motivos topográficos.

La comunicación entre la nave de San Bartolomé y su torre es a través de dos arcos de herradura.

Plano de San Bartolomé de Gavín. Dibujo Julio Gavín.

Vista del lado sur y oeste de la ermita

Dibujo de San Bartolomé realizado por Julio Gavín.

Puertas con arcos de herradura para unir la nave con la torre. Fotografía: José Antonio Duce.

Interior de la nave con un banco corrido y suelo decorado con motivos geométricos hechos con cantos rodados.

Interior de la nave de San Bartolomé. En el muro de la derecha se abre la puerta con arco de herradura que da paso a la torre.

Interior de la torre que está terminada con la técnica de  aproximación de hiladas. La luz entra por las cuatro ventanas tríforas.

MONASTERIO DE SAN PELAY DE GAVÍN

En el número 108 de la revista Serrablo podemos leer los primeros momentos de la excavación arqueológica llevada a cabo en 1997: «La iglesia baja comenzó a aparecer a unos 50 cms. del suelo. A partir de allí siguieron las primeras
hiladas de piedras que nos indicaban que estábamos al nivel de la bóveda».

Interior de la nave de la iglesia, en el centro el altar sobre dos escalones. Fotografía: José Antonio Duce.

Cabecera del monaterio de san Pelay de Gavín, la pared central que se conserva es el altar. Foto: José Antonio Duce.

Arranque superior de la escalera de caracol.

A la izquierda de la cabecera un ábside decorado con arcos ciegos y una ventana aspillera en el centro del ábside. Fotografía: José Antonio Duce.

Cripta del monaterio a la que se accede por una escalera de caracol y un pasillo. Fotografía: José Antonio Duce.

Interior de la ventana aspillera abocinada en la cripta.

Desde la cripta se ve la puerta de acceso al corredor subterráneo que comunica con las escaleras de caracol. Fotografía: José Antonio Duce.

La puerta que quiere recordar a un arco de herradura.

La triple columnata es elemento repetitivo en San Pelay. Al fondo, iluminadas las escaleras de caracol.

 

Interior del corredor que comunica la cripta con las escaleras ascendentes con la planta primera.

Espectacularmente bien conservadas y contruidas las dos escaleras de acceso a la planta superior desde el corredor de la cripta. El interior del corredor conserva su bóveda de cañón completa.

La curvatura de la escalera de caracol es perfecta.

Salida de la escalera de caracol. En la foto se aprecia la cubierta que protege todo el yacimiento.

 

Desde el interior del corredor entre la escalera de caracol y la cripta. Iluminado se ven las tres columnas que sustentan el arco fajón de la misma.

En la cripta, arranque de un arco fajón apoyado sobre tres columnas hechas de «rodajas» de piedra, como las columnas de las ventanas tríforas de Lárrede y San Bartolomé de Gavín.

Parte superior de un arco que asoma en el interior de una de las salas del monasterio.